sábado, 12 de mayo de 2007

¿Por qué no dices "te quiero"?

Hoy me siento perro. Sinceridad ante todo, ¿no? Así que voy a trasladar mis palabras, o algo que siempre he considerado muy importante, a un artículo de una mujer que siempre he creido inteligente pero que, además, con este texto me ha demostrado (veas tú si me tendrá que demostrar a mí nada) que sabe escribir y poner en situación, que es casi más importante -claro que una mujer que ha sido (no es ya, no?) la directora de Interviú, tiene que ser muy lista, por lo menos-. Un texto de Teresa Viejo, titulado como titulo yo este post:

Afuera apenas se vislumbran sombras pero dentro un resquicio de luna se ha colado en la espalda del otro y se acompasa a su respiración. Ella sabe que se ha dormido y eso que han pasado sólo un par de minutos. Otra vez se olvidó de la frase. Como ayer y el día anterior, como se le pasa decirla cuando agita el nescafé entre legañas antes de lanzarse escaleras abajo para no perder el tren de las 8.40.

A veces ella se la implora y él se la regala con un beso, pero cada vez menos porque la mujer se ha cansado de tirar del carro. Si sigue así terminará como sus amigas que no dan si no reciben y de tanto callarse los "tequieros" se han olvidado de su uso.

A fuerza de pensar en los afectos y sus ausencias ya conoce de memoria las retahílas de explicaciones sobre el porqué de las palabras: entiende que el cariño verbal es gasolina, que la seguridad y la autoestima se refuerza con los mimos y que el amor debe narrarse a cada paso.

Puede disertar sobre las diferencias entre "te quiero", "te amo" y "te extraño" y escudriñar en el tono de lo dicho matices infinitos. Vamos, que es una experta en el amor oral aunque a su pareja le cueste tanto practicarlo. O lo considere poco y eso que cuando ella halaga sus habilidades con la mecánica él se infla como un pavo, lo que indica que también es receptivo a los cumplidos.

Ahora la espalda del hombre se agita en un ronquido y ella cierra los ojos según se anuda a su cintura: "¿Que me quieres? Pues claro sí, pero... ¿tanto te cuesta decirlo?

Pocas palabras, pero mira, me ha llegado adentro. Gracias, Teresa Viejo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Siempre sabes poner una sonrisa en mi boca, incluso un día gris como hoy...

Será por eso x lo q Te Quiero???
Besos de cine

Anónimo dijo...

¿Teresa Viejo? No tío, no. Ella no.

Flanagan McPhee dijo...

Ya, ya lo sé, Realove, pero... Juro que es por el texto, que es muy bueno... Lo siento, si sirve de algo...