Reflexiones (obvias) descubriendo las pijadas del iPhone

Hola, sí, sígo aquí. No, estoy bien. Sí, es que he andado un poco liado y tal. No, no he podido acercarme antes. Ya, ya sé que soy un dejado y todo eso. Y de veras que lo siento, pero no ha sido mi mejor mes. ¿Qué dices? Ah, no si yo también te he echado de menos. Bueno, te prometo que no volverá a pasar. Lo siento, en serio. Venga, va, confía en mí. Bueno. Vale Yo también. Un beso, sí. Ahora me paso.

Disculpad, es que tenía una llamada (mi blog, que se comporta como un novio despechado). Se ve que con el iPhone también se puede llamar. Fíjate tú. La cantidad de pijadas que tiene, y va y resulta que en Apple no se olvidan de poner un teléfono. Si es que piensan en todo...


Aquí una monada de aparatito que mis padres me han traído de Nueva York. Entre otro millón de cosas, que mi casa parecía el 6 de enero el pasado fin de semana. En definitiva, que yo sí que amo a NY. Es más, voy a hacerlo público.
Hala, primera obviedad (¿a quién no le gusta NY, con la caña que nos han metido con el cine y las series en USA?). Esto ya se está pareciendo a los blogs que hablan del "¿por qué no te callas?" del Rey o que se dedican a meterse con El Mundo por la teoría de la Conspiración del 11-M. Algo obvio, por más que lo hagas de una forma divertida. O no. Pondría links a estos sitios, pero:

1. Me quedaría un post muy largo.
2. Sería demasiado obvio.

Así que dejaré el trabajo a los pseudoperiodistas que andan por ahí vangloriándose de sí mismos y opinando como si fueran críticos de la actualidad consumados.

Nada, perdonad por el "momento acritud". Es que hay alguno que me puede. Yo a lo mío. Me quedo con mis regalitos de Nueva York, que al fin y al cabo yo soy el superficial de esta historia.

Y es que mis padres se lo han currado. Incluso, me han regalado una libreta con la bandera de EEUU en cada hoja, para cuando me da el momento "anti-capitalismo" -que me da pocas veces, pero alguna que otra vez me da-, así puedo quemar una hoja y sentirme super moderno y atrevido, como los que queman las fotos del Rey (y volvemos a lo obvio).

Suena La Revolución Sexual, así que cambio de tema.



Y es que hace tiempo que pienso que me he quedado anticuado en el tema de la música. Las canciones de verano me horrorizan (comparto sentimientos con Las Horas del Lobo en cualquiera de sus posts veraniegos), los nuevos grupos me producen dolor de cabeza y los cantantes consagrados que antes conseguían que los escuchase, ahora mismo me interesan lo mismo que un reportaje de Vidas Anónimas.

Y va y resulta que la respuesta la tenía entre las miles de canciones que durante años de ser el único con PC en casa he ido atesorando en la carpeta que, comosiempre, yo, tan obvio, llamaba "música" (¿os pasa también a vosotros que siempre que ponéis música os sale "muscia"? ¿o será que soy disléxico y no me he dado cuenta aún?).


Pues eso, que descubrí a estos 5 chicos, que en realidad no son 5, porque es un tío que se llama Guille Milkyway -qué nombre más simpático- y que hace canciones que, en palabras de mi novio son "cutres" y en las de mi compi-de-curro/compañera-de-facultad/pero-sobretodo-gran-amiga, como yo la llamo (cómodo, eh?), "parecen sacadas de una serie de los 70". ¿Por qué lo dirá?

Pero a mí me gusta, sobre todo desde que mi compañero Real Love -tu CD está ahí, esperando a vernos- me puso en Canciones de Verano "Viaje a los sueños polares".

Y como algunos dicen que no me pega este tipo de grupos poperos-modernos, pues me he cambiado el estilo de vestir. No puedo ser un gafapasta completo, por eso de la operación láser, pero voy cambiando de estilo (para horror de Eric, que está hartito de mis cambios, porque no puede powerpuffearme).

Nada grave: pelo corto, barba arregladita, americana con camiseta y poco más. Pero es un cambio. Eso sí, no me he dejado la bandolera de Superman -con borrar el recuerdo de quién me la regaló, suficiente-. Y ya está, versión 3.11, como el Windows antiguo.

Aunque siempre tendré espacio para este estilo en mi vida (aunque sea los fines de semana). Así aprovecho y pongo mi supernene :-P


No sé si me parezco, pero yo me recuerdo a mí mismo un montón (ese cigarrito...). Y mi Eric, que me quiere mucho, pues me ha pintado muy cultureta, delgado y estupendo. Cosa que no es realidad ahora mismo, pero bueno, para eso estoy yendo al gordólogo.

Gordólogo, o gordóloga en este caso, con quien tuve una conversación de este estilo:

Yo: Hola.
Gordóloga: Hola. ¿Qué es lo que querías?
Y: Pues... (pienso un poco) Adelgazar, ¿no?
G: Pero digo yo que querrás más cosas...
Y: No. Al gordólog ovengo a adelgazar. Soy así de simple (sonrisa).
G: Bueno, pues veamos a ver. Porque no pareces gordo. Pero vamos a hacerte la prueba de la grasa (me hace la prueba). Ah, vale, pues sí, estás gordo. Y bastante. ¿Quién lo iba a decir?
Y: Ya, bueno, eso lo sabía yo antes de venir.
G: Pues nada, tenías razón. Vamos a ver qué régimen te pongo.

Algo así. Dejando a un lado el poco tacto que tuvo la chica, la verdad es que el régimen va bien, gracias. Sólo tengo ganas, muy de vez en cuando, de morder los cantos de las paredes, por si tienen algo de alimento. Pero por lo demás estoy de lo mejor. Super tranquilo. Y sin hambre.

Pero bueno, esto de tener hambre con el régimen es otra obviedad. No, si al final va parecer esto un bloc de notas cualquiera...

Cambiemos de tema. Para quien no lo sepa, tengo una perra en casa. Nooka, se llama la niña. Es una boxer (como puede observarse en la foto) y es la cosa mas mona del mundo (como también puede observarse en la foto, claro)


Como tiene tres meses, pues no hace mucho más que dormir y dar por saco, pero es una monada. Y temir con esa carita, entre curiosa y de pena y como a una Patricia Conde cualquiera, le haces caso, aunque te acabe de hacer una trastada monumental -básicamente, romper revistas en menos de tres minutos, comerse el papel higiénico o perseguir un canto rodado por toooooooooooooda la casa-.

Pero es muy mona. Es la primera mujer con la que comparto mi vida. Tengo que limpiar porque se mea por todas partes y tal, pero mira, compartimos la vida. Es la única que se alegra cuando vengo a casa (huy, cómo he sonado a mi tío el divorciado...). Más que nada porque, en mi caso, es la única que está.

Salgo porque no paro, aunque no haya trabajo en la empresa. Como uno es tonto y trabaja más gratis que cobrando, pues me paso el día de estudio en estudio y tiro porque me toca (que no rima, pero es lo que le pega).

Bueno, vamos cerrando el chiringuito, que ya creo que es hora -tendré que escribir más a menudo, porque vaya rollos que suelto-. Lo haré con algunos hombres de esos que voy encontrando por la red y que me fascinan. El primero, ha supuesto un antes y un después en mi visión de la sexulidad en los hombres.



Ya, si uno de estos usa Antidote, no me puedo resistir. Y sin Antidote también, para qué engañarnos. Pero vamos, que quien me quiera conquistar... le va a costar un huevo, porque ando enamoradísimo, pero 7 de los 10 puntos necesarios se los lleva el llevar esa colonia y que le huela bien...