100 entradas no son nada

Hoy iba a hablar de un sueño que he tenido. En él, le decía a Pimpinela que si ellos querían, les ordenaría su habitación de los libros. Os lo juro. Ha sido un sueño de esos en los que eres consciente de lo que haces. Incluso, diría yo, que he sido consciente de cómo les decía que lo haría yo, porque ellos sólo comentaban que que necesitaban a alguien. Y, en el fondo, sólo lo hacía por poder estar a su lado, porque sabía que ellos (Pimpinela), estarían fuera de casa durante el fin de semana. Y hasta ahí pensaba escribir.



Pero es que se trata de la entrada número 100. La Centenaria. Si fueran años, cumpliría un siglo. Mareeeeeee...

Total, que me he dado cuenta de que, desde que abrí el blog, lo cambié (por razones hormonales dobles, más que otra cosa) y volví a volver -el otro sitio, aunque acogiera a dos hombres espectaculares, no era de mi agrado-, han pasado más de 100 entradas que han retratado lo que sentía en ese momento.

Si esto fuera Yo soy Bea, ahora vendría un momento flashback de los impresionantes. Y si fuera Dawson Crece, la cosa iría por un capítulo de los que hacen historia, con plotlines reveladores, giros increíbles y muchas, muchas novedades.

























Pero esto sólo es "Unas Gotas de Chanel nº5". Las palabras que Marilyn Monroe decía cuando le preguntaban "¿qué te pones para irte a la cama?". Una frase inocente que escondía mucha sexualidad. No sé si me entendéis...

Un blog por el que casi he sido denunciado (ahora todo el mundo estará con la boca abierta), en el que he editado por amor, he discutido por amor, he llorado por amor, he descargado mis frustaciones, mis necesidades (habitualmente sexuales), mis triunfos y mis derrotas.

Principalmente lo he usado -malamente- como un diario. Y eso que nunca he hecho uso de uno cuando me lo regalaron para mi comunicón... Quizá pensé que la idea de que alguien en Oceanía o en Marruecos pudiera leerme significaría, por tanto, que lo que escribía no era un mensaje en una botella.

Jamás pensé que me leería tanta gente indeseada. Mucha gente que ha intentado convertir esto en un "medio de comunicación" (gracias por la consideración, por cierto). Otros han intentado buscar segundas, tercera o cuartas lecturas. Pero aunque la gente sea de lo más retorcida, la rtealidad es que, excepto en algunos casos muy contados, he sido como soy en realidad: más simple que el mecanismo de un botijo.

He aprendido a callar, a codificar mis frases para despistar, a estar como ausente... He aprendido, en definitiva, a saber cómo comportarme en la vida.
Pero como esto no es un momento flaschabck (aunque lo parezca), no voy ahablar del pasado. Voy a hablar del futuro. Sé que hace tiempo que no me paso por aquí y lo siento, pero entre mis paranoias y mi falta de tiempo, no he podido hacerlo.

De todos modos, os recomiendo que paseis por mi fotolog. Es fácil: http://www.fotolog.com/withoutregrets. Es más fácil y más cómodo para mí, al menos por la falta de tiempo. Por aquí, escribiré cuando tenga algo que contar. Como el sueño de Pimpinela. No, en serio, escribiré más a menudo. Sólo necesitoque My Sky sea menos sutil conmigo...

Besos a todos, sin excepción (qué malo soy...).



Para terminar, unos hombres, como hace tiempo que no incluyo...