Oye, ¿tú no tienes ningún amigo que sea heterosexual?
Me quedé pensando un rato y le contesté: "Claro que sí, hombre. Casi todas mis amigas son hetero. Alguna lesbiana hay, y unas pocas bisexuales. Pero la mayoría son heteros".
- No, no. Me refiero a amigos. Masculinos.
- ...
Y, claro, me dio por pensar. Porque, ¿qué respondo? Sí, alguno tengo por ahí. Conocidos, compañeros, coleguillas. Pero, ¿amigos? Bueno, dejando a un lado lo de "los verdaderos amigos se pueden contar con los dedos de una mano... y sobran dedo" y también la perversión de la palabra "amistad" que ha proporcionado el Facebook (ya, si eso, otro día me meto en eso)... Sí, tengo alguno... Pero siempre tienen o han tenido un pero. Principalmente, que me encoño (¿debería decir empollo?) de ellos.
La verdad es que sólo hablo por mi experiencia. Que, ahora que lo pienso, suena un poco egoísta. Pero bueno, para eso soy el que escribe aquí. Quien quiera diferir de mi opinión, que lo haga en los comentarios o que se abra su blog propio, que es gratis.
En fin, que desde que tengo uso de razón gay -que no, no es la misma que la razón-razón, que esa no la creo que la haya conseguido aún-, siempre que conozco a un hetero, acabo perdidamente encoñado de él (tendré que acostumbrarme a decir empollado, porque enamorado ni de coña). Y, casualmente, coincide con cuando estoy más salido que nunca.
Me pasó ya en el colegio, en esa época en la que sabes que lo eres, pero no quieres reconocer ni a ti mismo que lo eres (cuesta, mucho, creedme). Ahí estaba... le llamaremos Francisco. Fran. Sí, me gusta. El caso es que ahí estaba. Hablábamos como dos amigas quinceañeras (siempre de la chica que le gustaba en ese momento), compartíamos horas y horas de compañía mutua, nos lo contábamos todo,... Hasta que consiguió a la chica (bueno, las consiguió a todas, que uno no se empolla de cualquiera, qué os creéis) y empezaron los celos.

No, no es Fran, pero me apetecía ponerlo. Como Vargtimen ya no lo saca en su blog...
Conseguí un par de besos, un calentón importante y... poco más.
Luego llegó la Universidad. Con ella, nuevos amigos, nuevos empolles, viejos empolles que cobraron fuerza, una historia demasiado triste para contarla ahora mismo, que siempre se me caen las lágrimas y esto es para pasar el rato, no para deprimirse, qué narices... Luego otro medio-enamoramiento (y, por tanto, medio-empollamiento) de alguien que creí que era gay, que luego no lo era y que ahora me llegan rumores de que puede serlo (un lío, ¿verdad?). Y durante todo ese tiempo, además... Berto (por ejemplo).
Se convirtió en mi mejor amigo y fuimos inseparables durante los cinco años que duró la carrera. Luego se acabó la carrera, mantuvimos el contacto un tiempo... y se acabó. A broncas, como los novios. Y es que nuestra relación fue bastante matrimonial. Supongo que me lo busqué, porque iba detrás de él como una novia enfermiza. Y así me fue.
Así que decidí no volver a tener amigos heteros. O si los tenía, que fueran feos. O que no me gustaran nada. Y, hasta el momento, me había ido bien.
Lo único que me he permitido es tener amigos heteros que, o bien estén casados (aunque sean monísimos y estupendos y bastante sexies), o bien sean amigos de amigas. Así no me meto mucho en la relación y, aunque normalmente me pongan bastante (tendríais que ver a los maridos y los amigos de mis amigas, que están buenos pero un rato largo), como no tengo relación más allá de cuando nos juntamos en casa de la amiga común, todo va bien.
Total, que creía que me había curado de esto. Pero ahora estoy conociendo a otro hetero. Diego, esta vez. Diego es un encanto. Me lo paso bomba con él. Me río, se ríe conmigo, viene a visitarme al curro, hablamos por el messenger... Si hasta incluso ha venido a mi casa "a hacerme una visita" en más de una ocasión...
En fin... que me estoy empezando a sentir (bueno, lo siento desde hace tiempo ya, para qué mentir) un poco empollado. Y no mola. No mola porque, además, con este chico me pasa algo raro y es que creo que entiende por momentos. Vale que mi gaydar (el radar-gay con el que todo homosexual nace, en teoría) está más pirado que HAL 9000, pero la verdad es que yo cada día le veo más punto.
Vamos, que sigo con el calentón, pero con éste ni siquiera he conseguido un beso en la mejilla (todo se andará). Para terminarlo de complicar, el chaval va y me dice que quiere cogerse una buena borrachera conmigo. Vamos, que me estoy perdiendo...
Y no quiero, porque, en teoría, es hetero. Tiene novia y tal. Aunque sale por sitios de ambiente "porque te lo pasas bomba", no pasa un día sin que hablemos por el messenger 3 veces mínimo (algo que no es muy normal) y me llama Jack "por ponerme un mote cariñoso". Normal, normal, no es. ¿No creéis?
Y si a eso le unimos que he empezado a ir a la piscina y me estoy encontrando toda clase de fauna "espectacular", y eso que voy a las 6.30 de la mañana... Pues ¡imaginad el calentón que llevo encima!



9 comentarios:
En fin..
Bromuro. Bromuro todo el rato ;)
Un beso. Echaba de menos estas entradas!
Pecho, quizá el bromuro sea una acción un poco radical, no crees?
Pues vaya con la gente que va a tu piscina... Hace tiempo que no pongo fotos del Internado, es verdad. Martín Rivas y toda su familia ficticia me aburren soberanamente.
Y cuidadín con tu amigo, Jack.
A mí me pasa un poco lo contrario. Todos mis amigos de siempre son heteros, y soy incapaz de pillarme por ninguno de ellos (en general, de nadie con el que establezca una relación de amistad un poco profunda. Se me va la libido...
Varg: Resulta que a las 6.30 sólo nadamos los gilipollas (como yo) y los semiprofesionales. Así que imagina cómo está la piscina a esas horas. De un animado... Con respecto a lo de mi amigo... Tengo un problemón con ello, sinceramente. Pero bueno, lo llevo bien. Mientras no venga a verme al curro, que me deja atontao una hora, todo va bien :-P
B.Lee: A mí me pasa justo al contrario. No me ponen cuando los conozco, pero con el tiempo, muchas veces, me pone su personalidad. Y que sean heteros, supongo. A mí es que pierde lo prohibido...
mmmm hola :)
personalmente mis mejores amigos son mis excompañeros del colegio, la mayoria hombres y heteros....y nunca me he empollado con ninguno.
los adoro y cuando nos juntamos lo pasamos increible...pero debo admitir que despues de asumir mi tema...me aleje un poco de ellos (no tienen ningun drama ellos) principalmente porque empece a ir mas a bailar y empece a conocer nuevas amistades...
asi que si tengo amigos heteros...pero a pesar del cariño y todo...estamos medios alejados y conocer nuevos amigos hetero??...si, derrepente...pero nunca llegamos a ser erdaderamente amigos....conocidos buena onda jeje
Hola Milo:
Así me libro yo de empollarme. Simplemente, procuro que se queden en "colegas de buena onda", como tú dices. De todos modos, como puede apreciarse por el texto, soy de fácil empollamiento.
Por cierto, qué casualidad, me escribiste anoche y hoy viene Diego a verme al trabajo...
Pero hay alguien que siga usando el messenger? Qué cosas.
Lo de que vas con el calentón, no se nota por las fotos que acompañan la entrada, no te vayas a pensar.
Sí, hijo. Ahora la uso yo de herramienta de trabajo. Qué te parece?? Y no, no soy puta. Aunque cuadren muchos puntos...
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